La baja reposición de proyectos en un escenario de deterioro de la economía, menores ventas de viviendas nuevas, en medio de la fuerte inflación y trabas crediticias, además de las dificultades en las autorizaciones para desarrollar iniciativas, son algunos de los factores que explican que la inversión inmobiliaria en 2023 pueda caer a su menor nivel en al menos 15 años.
Según un informe de la Corporación de Bienes de Capital (CBC), con datos al segundo trimestre, este año la inversión inmobiliaria llegará a US$ 2.602 millones, considerando proyectos —privados y estatales— con cronogramas definidos sobre US$ 15 millones, que son los que analiza la entidad. Ese monto anual estimado representa un avance de 1,8% respecto de 2021, y supera a la proyección que había hasta marzo pasado, que era de US$ 2.445 millones, ya que en el segundo cuarto ingresaron nuevas inversiones al catastro, aunque también salieron otras.
Para 2023, en tanto, las perspectivas son desalentadoras. El organismo vaticina que el sector inmobiliario anotará inversiones por solo US$ 1.424 millones, lo que significa una contracción de 45% anual y, a la vez, el menor monto desde que la CBC lleva registro, es decir, 2008.
Sobre las razones de la disminución, el gerente general de la CBC, Orlando Castillo, comentó que “la reposición de nuevos proyectos con cronograma no es suficiente. Existe un grupo de iniciativas sin fechas definidas de obras, las que aún no poseen las aprobaciones de sus mandantes, a la espera de un mejoramiento de las condiciones de mercado o que están sujetas a permisos, tramitaciones, entre otros”.
Respecto de la baja prevista para 2023, Vicente Domínguez, director ejecutivo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), explicó que eso se debe principalmente a la caída en las ventas de viviendas, “el deterioro de la economía, con alta inflación y bajo crecimiento, y el clima de negocios desfavorable”. Añadió que “mientras esos tres aspectos no cambien, la situación no mejorará. Ello no obsta a que también hay otros problemas, como las aprobaciones en servicios y direcciones de obras municipales y el encarecimiento de los créditos”.
Al analizar en detalle las proyecciones de la CBC, se observa que la inversión habitacional —la más cuantiosa— retrocedería 46% el próximo año, hasta los US$ 904 millones. En tanto, las iniciativas mixtas descenderían 39%, a US$ 397 millones; mientras que las “no habitacionales”, donde están obras comerciales, de oficinas y hoteles, bajarían 56%, a US$ 123 millones.
Las cifras de empleo también exhiben un deterioro para el próximo ejercicio. El peak de demanda de puestos de trabajo en construcción, según el stock actual de inversiones, se habría registrado en enero de 2022, con 32.348 empleos. En tanto, para el primer trimestre de 2023 la cantidad se reduciría a cerca de 25.000.
Difícil recuperación
Para Vicente Domínguez, una reactivación de la inversión sectorial tiene relación con la mejoría del clima de negocios y el repunte de la economía, los que “son esenciales”, afirmó. Sostuvo que “ayudaría también el estímulo fiscal, aunque temo que ello será difícil que ocurra si tomamos en cuenta que en la reforma tributaria que se discute en el Congreso vienen reformas que inciden fuertemente en el aumento de costos, tanto para los desarrolladores de multifamily como para los que adquieren viviendas”.
Castillo estimó que “es probable que se vaya registrando pausadamente un mejoramiento de las proyecciones, en la medida en que las condiciones de mercado también mejoren, en particular, con el control de la inflación y su efecto en las tasas de interés”.
El gerente general de la CBC indicó que “también puede haber un efecto positivo si los planes de crecimiento en la construcción de viviendas sociales y con subsidio del Gobierno se concretan. Posteriormente, en el mediano plazo, dependerá si el país retoma tasas de crecimiento positivas, después de un período complejo como el que se anticipa para el próximo año”.
El informe de la CBC también detalló que el stock de proyectos del rubro inmobiliario para el quinquenio 2022-2026 suma 211 iniciativas, por un total de US$ 5.543 millones. Este sector representa 10,3% del total estimado a nivel nacional, alcanzando la cuarta posición después de obras públicas (37,9%), minería (28%) y energía (12,1%).
El 65,2% de la inversión inmobiliaria del quinquenio corresponde a edificaciones del tipo habitacional (casas y departamentos), 10,9% a “no residenciales” y 23,9% a proyectos mixtos.
Las iniciativas residenciales que más inciden en el cálculo para 2022-2026 son Parque Cousiño Macul, Etapas S1 y S2; Isla Lo Matta, Proyecto Inmobiliario Santa Elena, Ciudad Parque Chicauma y Ampliación Hacienda Los Conquistadores. Estos totalizan US$ 706 millones y están en la Región Metropolitana.

Fuente: Emol Octubre 2022